Álora ha iniciado su Semana Santa con una jornada cargada de fe y tradición en este Domingo de Ramos. Desde primeras horas de la mañana, numerosos vecinos se congregaron en la Parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación para participar en la tradicional bendición de las palmas de olivo, en una ceremonia presidida por el párroco Felipe Manuel Gallego Casco.
Tras la Eucaristía, dio comienzo la salida procesional de Nuestro Padre Jesús a su entrada en Jerusalén y María Santísima del Amparo Auxiliadora, popularmente conocida como la Pollinica, que recorrió las principales calles del municipio en un ambiente de recogimiento y fervor popular.
El acompañamiento musical estuvo a cargo, un año más, de la Banda de Cornetas y Tambores con Escuadras de Gastadores y Guiones de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, conocida como “Boinas Morás” de Alhaurín El Grande, que aportó el tono solemne y emotivo a la procesión.
El cortejo contó con la presencia del alcalde de Álora, Francisco Martínez Subires; el concejal de Cultura, José Díaz; el párroco Felipe Manuel Gallego Casco, así como hermanos mayores y representantes de las distintas hermandades y cofradías de la localidad. Numerosos nazarenos, muchos de ellos niños, participaron portando las tradicionales palmas del Domingo de Ramos, símbolo de esperanza y bienvenida.
Con esta procesión, Álora da el pistoletazo de salida a una intensa y esperada Semana Santa, declarada de Interés Turístico Nacional de Andalucía, en la que tradición, religiosidad y participación ciudadana se entrelazan para llenar de vida y sentimiento las calles del municipio.
